Cuando las normas se tienen que cumplir a golpe de sanción, no existen excepciones para casi ningún caso. El último ejemplo que se ha convertido en todo un fenómeno viral, lo protagoniza un niño de 3 años, que pese a su corta edad, no se ha librado de recibir su primera multa por un mal aparcamiento.
La última multa de tráfico peculiar que ya es todo un fenómeno en las redes, en esta ocasión no es por el motivo concreto de la sanción, sino por su propio infractor. Lejos de ser una realidad en España, que tampoco nos sorprendería, en Canadá un policía ha puesto una polémica multa de aparcamiento dirigida a un niño de 3 años.
La denuncia inmortalizada en una imagen de lo más simpática que recorre todos los rincones del mundo, busca tal como ha confirmado el agente objeto de la polémica, dar una lección de seguridad vial al pequeño infractor.
Curioso ejemplo educativo
Su pecado además de la inocencia, es que dejó su ‘moto’ olvidada en el puerto de Shawn Currie para jugar por la calle, mientras un policía aprovechaba este mal aparcamiento para ponerle la multa de tráfico. Esta sanción ‘educativa’ no la tendrá que pagar el pequeño, aunque tampoco creemos que haya sido la mejor forma de que un niño de 3 años comprenda el complejo mundo de la sanción.
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