Para poder librarse de una multa de tráfico a tiempo además de cumplir con los límites y normas que marca la carretera, es aconsejable conocer ciertos rincones o escondites, ideales para esconder los radares, para que no pillen por sorpresa a los conductores.
La picardía y cierta malicia son las principales responsables de la colocación en determinados lugares de los radares de velocidad. Puntos que por determinadas condiciones son difíciles de ver con antelación suficiente y que se convierten en los escondites perfectos para la imposición de multas. Un hecho que pone de manifiesto el interés tal vez mayor por recaudar frente a la propia seguridad.
Y si hace unas semanas nos hicimos eco de la nueva oficina de recaudación instalada en el túnel de Bailén por cortesía del Ayuntamiento de Madrid, a través de varios ejemplos de fotografías que presentamos a continuación, se podrá ver con más claridad ese interés lucrativo frente a la apuesta por la seguridad.
En el ranking de los escondites más rebuscados para situar los radares, en primer lugar contaríamos con un ejemplo prácticamente imposible de ver ni aunque tuviésemos vista de lince. El radar en cuestión nos pillaría totalmente por sorpresa al estar situado justo debajo del guardarraíl al empezar un puente. Un punto que nunca consideraríamos ni remotamente sospechoso y sin embargo es clave para recaudar en multas.
En otras ocasiones se aprovecha ciertos elementos y servicios de la propia ciudad para camuflar los radares y que pasen totalmente desapercibidos, Éste sería el caso del típico contenedor de basura que esconde debajo de la tapa un instrumento que no tendrá en cuenta si se deposita vidrio o papel en éste, sino que estará pendiente de la carretera y de la velocidad de los vehículos para asaltarles con multas en un momento totalmente inesperado.
Sin embargo en el colmo de la maldad y de jugar con la inocencia de los conductores y viandantes, está la estrategia del ‘insecto palo’, es decir, esconder los radares dentro del mismo mobiliario urbano creyendo que son elementos decorativos muy originales que no dudan en fotografiar a todo conductor que pase.
el caso es recaudar cuanto mejor